sábado, 24 de abril de 2010

Analizando... "In the court of the Crimson King" (King Crimson)

Si esta simpática portada ha captado vuestra atención, me dispondré entonces a hablaros de una de las mejores obras maestras en la historia del rock progresivo y debut de uno de sus pioneros, King Crimson.

"In the court of the Crimson King" es más que un disco, es otro mundo, una fusión entre elementos de jazz, rock y sobre todo folk, con arreglos de teclado que imitan sonidos orquestales; unas estructuras debatería impecables, cargados de redobles y contrapunto; punteos de guitarra con una marcada influencia de jazz, y la brillante voz de Greg Lake, que tras grabar el tercer disco de la banda, en 1970, la abandonaría para iniciar una exitosa carrera con el trío Emerson, Lake and Palmer, otro de los grandes del género.

La corte del rey carmesí abre, pues sus puertas con la alocada "21st century schizoyd man", con su atractivo riff tocado por guitarra y saxofones, la voz de Lake a través de un micro distorsionado. Más adelante, esta canción coge un ritmo muy dinámico y psicodélico, mientras que la guitarra, el bajo y los saxofones interpretan un segundo riff en el que se nota tambien esa influencia jazzística que caracterizaría los dos primeros discos de la banda.

Pasamos a "I talk to the wind", una preciosa canción donde destacan las harmonías de voz y flauta que parecen recrear un mundo de fantasía. En esta canción, al igual en las demás, se aprecian una magnífica composición lírica por parte del letrista Peter Sinfield, que trabajaría con el grupo durante años.

Las letras tienen un gran contenido poético, como es el caso de esta canción:

"Said the straight man to the late man
Where have you been
I've been here and I've been there
And I've been in between."
("Dijo el hombre temprano al tardío:
¿Dónde has estado?
He estado aquí y
he estado ahí y
he estado en el medio")

Después de ésta llega una emotiva canción de más de 8 minutos de duración, "Epitaph". Con una letra tambien muy poética, un sintetizador con un sonido atmosférico y los punteos de guitarra del líder de la banda, Robert Fripp, único mienbro permanente hasta el día de hoy.

La siguiente es "Moonchild", la cual tambien tiene un sonido muy similar a las demás canciones de este álbum, pero a partir de los 2 primeros minutos, se convierte en una improvisación entre el teclado y la guitarra, con una intensidad muy leve, que la vuelve relajante.

Más adelante se vuelve inquietante, ya que éstos empiezan a tocar notas sueltas con "poca coherencia". A pesar de esto, ambos terminan manteniendo una pequeña harmonía que se desvanece.

Y llegamos al clímax del disco, "The Court of the Crimson King". Esta canción describe literalmente un mundo practicamente medieval, dónde las estrofas acaban repitiendo el título, mientras que los instrumentos abren un acorde de forma explosiva. Y cuando parece haber acabado, suenan los platos suavemente y el teclado vuelve a hacer los acordes del estribillo con un sonido similar a un coro de flautas.

En fín, os recomiendo a todos este disco(incluídos los demás miembros del blog), porque a pesar de que no todos estén familiarizados con el estilo de esta banda, y de que con el paso de los años su estilo haya evolucionado y se haya vuelto más oscuro y frío, este disco es bastante escuchable.

Os dejo con la canción que da título a este fantástico trabajo.

1 comentario:

  1. dios ! epitaph es una cancion orgásmica ! me ha encantado esta crtítica si señor ! creo que pocas canciones me han puesto los pelos de punta como esa...

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