El primer LP de la banda de Seattle fue publicado en 1990, después de haber sacado el EP "We die Young".En este álbum encontramos la formación inicial del cuarteto: Layne Staley (voz), Jerry Cantrell (guitarra y coros), Sean Kinney (batería) y Mike Starr (bajo).
Por aquel entonces el grunge era un estilo que empezaba a emerger en la industria musical, aunque fue gracias a éste álbum y más tarde a la publicación del "Nevermind" de Nirvana y del "Ten" de Pearl Jam al año siguiente cuando se convertiría en un estilo mundialmente popular.
El caso fue que la banda consiguió una oportunidad de grabar un disco después de que un miembro de la compañía Columbia Records asistiera a uno de sus conciertos.
Este fue el primer disco hecho por una banda grunge que alcanzaba tal nivel de ventas en tan poco tiempo, gracias a la difusión del single "Man in the Box" a través de la cadena MTV.
Como con otros grupos dentro de este estilo, una de sus influencias por antonomasia es Black Sabbath, aunque en este álbum poseen un sonido más ligero que en sus dos trabajos posteriores.
Una de las características de Alice In Chains son las harmonías vocales entre Staley y Cantrell.
Además de la incombustible voz rasgada de Staley y del buen acompañamiento de Cantrell, cabe destacar también las líneas de guitarra de éste último. En una misma canción hace riffs o acordes mientras canta, y después están sus solos, una muestra de buen gusto y de saber encajar dentro de la base.
Cabe destacar que ya en este disco nos muestra su inclinación hacia escalas orientales ("Love, Hate, Love").
El bajo de Starr tiene un sonido contundente, sin tocar líneas demasiado complejas, y la batería de Kinney tiende a ritmos dinámicos con cortes certeros, además de tener un sonido ligeramente reverberado.
Como ya es de esperar, las letras tratan temas relacionados con la tristeza, la muerte o el odio así como también el sentimiento de marginación, uno de los principales males que atormentó a la Generación X.
Puestos a escoger os podría hablar de la que abre el álbum que mencioné antes, "We die Young", que se abre con un riff de guitarra imponente y donde podréis escuchar la voz de Staley desprendiendo toda su ira.
Lo mismo ocurre en "Man in the Box" (antes mencionada), "Sea of Sorrow", "I can't remember", "Love, Hate, Love" o "Confusion".
Este es un disco francamente redondo, de principio a fin, aunque la obra magna del cuarteto de Seattle sea el posterior "Dirt" y también merezca una especial atención el disco homónico de la banda, a pesar de no haber tenido tanto eco.
En fín, no tengo nada más que decir, os dejo con el video oficial de "Sea of Sorrow", que define bastante bien el sonido de este magnífico disco:
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