sábado, 26 de febrero de 2011

Analizando..."Freedom" (Neil Young)

Llevaba mucho tiempo queriendo hablar de este disco.

"Freedom" devolvió el éxito a Neil Young después de toda una década falta de éxitos más conocida como "los 80".

Un detalle que recuperó para la grabación de este disco: todas las canciones fueron grabadas en directo, eliminando el sonido del público en las remezclas, siguiendo el patrón de "Rust Never Sleeps", álbum del que hablé hace tiempo, con el que "Freedom" lleva toda una década de diferencia, y sin embargo supone su perfecta sucesión.

Incluye también una versión acústica y eléctrica de una misma canción al inicio y final del álbum respectivamente. Se trata de uno de sus mayores éxitos, "Rockin' in the Free World", canción que se puede considerar un punto de referencia para grupos de la "escena Seattle", más concretamente Pearl Jam, ya que la han versionado innumerables veces, además de tocarla con el propio Young.

Se trata también del trabajo más variado de este comositor canadiense. Entre sus 12 canciones podéis encontrar una vuelta a sus raíces folk/country con "Hanging On A Limb" (*preciosas harmonías entre las voces y las guitarras), y "Too Far Gone" (* aquí sí que recupera claramente el sonido de sus orígenes, con melodías muy sencillas acompañadas por pocos acordes).

Otras a medio camino entre el country y el rock, como "The Ways of Love"(*un riff pegadizo y una melodía fácil de recordar).

Algunas más con un sonido puramente rockero con un pequeño parecido a Dire Straits (desde mi punto de vista), como "Crime In the City"(*la canción más larga del álbum, con casi 9 minutos de duración debidos a su extensa letra), o "El Dorado"(*un trabajo impecable con las líneas de guitarra, así como el detalle de añadir unas castañuelas).

Un par de canciones suaves y melancólicas, orientadas en una onda más intimista: "Someday"(*una canción ideal para acabar la semana. Cualquiera lo diría con esa melodía de piano y sintetizador tan bonita), y "Wrecking Ball"(*mucho más calmada que la antes mencionada. El instrumento más destacable es posiblemente el piano, que acompaña a una melodía muy delicada, casi susurrada).

Y por supuesto tenéis otras que reflejan cierta influencia del creciente rock alternativo: una de ellas obviamente es "Rockin' In the Free World"(*un himno para la "generación X", cuya letra refleja el estado de decadencia de la América de la era Reagan), "Don't Cry"(*una estupenda dosis de ruído, alternado con estrofas claras y limpias), "No More"(*de ésta última lo más destacable es la guitarra: los punteos y riff principal son "exquisitos"), y además también se incluye una versión de "On Broadway", una canción mitiquísima de los 60, que Young toca a su manera, ruidosamente).

Parece increíble que tuvieran que pasar diez años para que Neil Young nos deleitara con un trabajo elaborado (y tanto). Personalmente, lo considero una estupenda recomendación, tanto por su personalidad como por su variedad.

Y como era de esperar, os voy a dejar con "Rockin' In the Free World":

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